Reseñas de niños

Un día, mientras veía cómo mi hijo mezclaba todos los colores de la plasticina en un solo tono de tristeza marrón, me di cuenta de que él y yo tenemos ideas distintas de lo que significa jugar. Yo prefiero que todo esté limpio y ordenado, y que los juguetes estén ordenados según los colores del arcoíris del TOC, y a él le gusta rayarse los pantalones.

No cabe duda de que cada vez que voy a elegir un juguete nuevo para mi hijo, tiendo a hacer preguntas equivocadas como "¿Será divertido?", "¿Lo sabrá usar?" o "¿Será fácil de armar y guardar?", cuando claramente debería estar haciendo preguntas más lógicas como "¿Dolerá mucho si me lo tira por la cabeza" o "¿Se quedará muy pegado al pelo de las gatas?".

Y es así que me puse a pensar, ¿qué pasaría si los juguetes para niños fueran evaluados por niños? Sí, suena extraño, como si las mujeres opinaran sobre los derechos reproductivos de las mujeres. Qué locura. Pero creo que si yo juzgara los juguetes en función de cómo los usa mi hijo y no por cómo los usaría yo, perdería mucho menos tiempo googleando cuántas crayolas se puede chupar antes que sean tóxicas.

Estas son algunas reseñas de productos como me imaginaría que las escribiría mi hijo:

Libros:

Me gustan los libros. Son buenos para sentarse y para atacar a papá y a las gatas. Vienen con sus propios dibujos y palabras, pero me gusta mejorarlos con mis propios dibujos. Los marcadores y las crayolas sirven; pero el ketchup también funciona. A veces papá quiere usarlos para leer, lo cual es extraño, pero elijo uno y lo leemos juntos, y de nuevo al día siguiente, y al día siguiente, y al día siguiente, siempre el mismo libro, a papá le encanta ese. Incluso hace todos los ruidos de los animales. ¿Sabían que leones, los tigres, los osos, los hipopótamos y los dinosaurios suenan todos igual? Qué confuso para ellos. A veces trato de leer solo, pero siempre termino accidentalmente arrancando todas las páginas y doblando el libro para atrás hasta que no se puede volver a cerrar. Los libros son muy frágiles. Cuando termino, me gusta dejarlos en el piso para facilitar el acceso, y siempre en un lugar aleatorio, preferiblemente donde la gente camina mucho. No son buenos para jugar en la bañera. Cuatro estrellas.

Marcadores de colores:

Tengo muchos colores. Me gusta dibujar primero con los oscuros y pasarles por arriba con los claros, para que los claros se manchen y se conviertan colores nuevos! Todos vienen con sus propias tapas, que me gusta guardar abajo del sillón. A veces los vuelvo a poner en los marcadores y mezclo y combino los colores, y a mamá le encanta. Son geniales para decorar la mesa, las manos y las paredes, porque no se lavan y entonces tu arte vive para siempre. También funcionan en papel. Son fáciles de guardar, encajan perfectamente en los almohadones, en la cama de las gatas y en la bañera. Y también se pueden dibujar un montón de cosas, cualquier cosa que puedas imaginar, como una carita, una carita azul, una carita marrón o una carita negra. En cuanto al sabor, no saben muy bien; aunque mejor que las gatas. Cuatro estrellas.

Cuna:

En nuestro cuarto hay una cama chiquita. Es como la grande en el que dormimos todos, pero más chiquita y con barrotes a los costados. ¿Es una mini cárcel? ¿Una canasta gigante? A veces cuando me quedo dormido, mami sin querer me acuesta ahí en lugar de en nuestra cama. No pasa nada, en cuanto me despierto grito y lloro hasta que se da cuenta del error. Mami es tan tonta. Ahora me gusta poner mis juguetes ahí, al lado de la ropa y las mantas que guarda mamá. Supongo que sería más fácil cambiarlo por un ropero... ¿o un castillo inflable? ¡¡O una piscina!! En fin, no me gusta. Una estrella.

Nuggets de pollo:

Me gustan los nuggets de pollo. Pero bueno, yo no soy quisquilloso con la comida, me gustan muchas cosas. También como nuggets de pollo con forma de dinosaurio, nuggets de pollo con forma de estrella y nuggets de pollo con forma de caras. Son excelentes para comer ketchup cuando no tenes una cuchara. Y es mejor si realmente los saboreas: recomiendo masticarlos entre 2 y 45 minutos, y escupirlos, como hace la gente elegante con el vino. Mami siempre me da 5, pero uno es realmente suficiente para una comida completa. Creo que le gustan las sobras frías. En general, excelentes, aunque necesitan más M&Ms. 4 estrellas.